martes, 9 de septiembre de 2008

SI MAURICIO FUNES GANA LAS ELECCIONES DEL 2009, UNA VALIDA PREGUNTA SERÍA ¿QUÉ ESPERAR?


Juan Carlos Sura Amaya
Opinión Personal.


La mayoría de salvadoreños con facultad de voto, coincidimos en que los 20 años de ARENA en el poder, han sido suficientes para considerar que es urgente una alternativa de cambio en el gobierno. Esta opinión se ve reflejada en las diferentes encuestas que dan como virtual ganador al candidato del FMLN Mauricio Funes. Y es que no es para menos cuando se tiene como ejemplo la precaria situación actual.

A Funes lo respalda la trayectoria periodística que lo colocó popularmente como un "luchador por el pueblo". Este prestigio acompañado con la prueba viviente de la situación actual y el simple hecho de que a Rodrigo Ávila no se le considera una persona capaz de gobernar un país como El Salvador, ha generado un respaldo popular que ya trasciende fronteras. Funes, en el extranjero, ya es visto como el próximo presidente de nuestro país.

La idea genera conformidad por la falta de voluntad política que han mostrado los gobiernos de ARENA que no han querido reconocer ni mucho menos profundizar en los múltiples delitos de corrupción, las malas políticas económicas, el problema en el sistema de salud y el grave problema de la delincuencia, entre otros. Estas son variables inequívocas que generan el actual apoyo a una nueva estructura de Estado.

Todo lo anterior sin tomar en cuenta la cloaca que se pudiera estar destapando en el interior de la Policía Nacional Civil, al revelarse, esta semana, posibles nexos de "grandes ligas", como dijera el Presidente Saca, entre PNC y bandas delincuenciales de crimen organizado. Ya Mauricio Funes ha dicho, que de comprobarse esta situación, Rodrigo Ávila estaría siendo descalificado para poder competir en los comicios del 2009, y es que parece lógico, porque si se llegan a comprobar estos vínculos, lo más seguro es que no sean nada nuevo en la cúpula policial.

Con un gobierno del FMLN se le estaría dando una mayor apertura a El Salvador hacia los países de América y del mundo entero. El servilismo en la relación con los Estados Unidos llegaría a su término y esto originaría una mejor relación de trabajo con el mismo Estados Unidos, pero además nos colocaría como un atractivo ante los países que no ven con buenos ojos las políticas del país del norte. De todos es sabido que en la mayoría de países de Europa, Asia y el resto de América Latina, los Estados Unidos no son bien vistos por su política mundial de intervencionismo. Además El Salvador ya no puede permitir que se le ordene como llevar las diferentes políticas estatales.

Un gobierno con Mauricio Funes, despertaría nuevamente el sueño de Simón Bolívar, ¡¡UNA AMÉRICA UNIDA!!

América se ha transformado. Lo que antes hacia ver como lunares a los países de línea social izquierda en América ha desaparecido. Ahora el lunar se ve representado por países como el nuestro, de los pocos que quedan por delinear hacia un país con visión de gobierno por el pueblo y para el pueblo.

Acá, como dijo Mauricio en la XXIV convención, el estado ha sido secuestrado. Los grupos de poder que manejan la estructura de ARENA no lograron medir su ambición económica y dejaron al lado, sino por detrás, lo que importa al pueblo, como lo son la seguridad, la salud, las oportunidades, etc.

Si gana Mauricio Funes, seguramente se produciría un cambio real en el ejercicio del poder. Con este cambio, los beneficiados seriamos todos los salvadoreños que reclamamos el restablecimiento de un estado de derecho. Todos, desde el presidente de la república, hasta el más insignificante ciudadano, debemos de ser vistos por igual ante los ojos de la ley. Es necesario un BASTA YA a las preferencias e encubrimientos que violentan las leyes salvadoreñas, generando así, impunidad y corrupción entre otros delitos.

Nosotros tenemos que reconocer que la democracia esta funcionando. Esto lo prueba el simple hecho de que yo pueda estar escribiendo estas líneas. No olvidemos que en una sociedad sin democracia, seguramente seria un delito opinar contra las aberraciones que cometen los gobiernos en turno. La democracia se debe de proteger y mantenerse. Por mucho que puedan insistir los areneros con la campaña del miedo, la única verdad es que se han quedado sin fundamentos. Nosotros somos testigos de la democracia imperante, incluso en Venezuela, país al cual lo visitan muchos salvadoreños que llegan, algunas veces, por eventos culturales y deportivos.

No debemos caer en los engaños de la campaña mediática. Mauricio Funes ha demostrado que su intención es mantener una apertura con la mayoría de países. Para la campaña mediática es un oficio relacionar al FMLN con Venezuela y yo me pregunto ¿y que pues?, si Venezuela nos puede traer muchos beneficios. Lo malo es que critican a Venezuela y Mauricio ni siquiera le ha visitado todavía. Por el contrario, se niegan a difundir eventos tan importantes, como lo fueron las visitas del candidato a otros países de América y Europa.

Si Mauricio Funes llega al poder, debemos de esperar un liderazgo moderado.
Mauricio tendrá la responsabilidad de trabajar de la mano con Salvador Sánchez Cerén y con su gabinete de gobierno. En la búsqueda del gobierno idóneo, tenemos que esperar un reclutamiento que se caracterice por incorporar en los puestos a las personas más capacitadas.


Tenemos que esperar el trabajo de una Primera Dama, dinámica y bondadosa, que sea capaz de atraer ayuda para proveer al más necesitado. Sabemos que Vanda Pignato cuenta con una amplia experiencia política y eso seguramente ayudará.

Para ayudar al liderazgo moderado, es importante que el partido ARENA sea una oposición buena y de consenso. No es recomendable que el país caiga en una ingobernabilidad generada por obstáculos que puedan provenir de malas intenciones políticas ayudadas por la mala influencia mediática. El partido ARENA tiene la obligación de entender, que una vez en el poder, lo que haga Mauricio Funes, debe de beneficiar al Estado, no sólo en el gobierno actual, sino también en los futuros gobiernos.

Va a ser difícil que el poder económico neoliberal acepte el cambio, pero la oportunidad de solidificar la institucionalidad del Estado no puede venir en mejor momento. Esta institucionalidad que se logre se deberá mantener como un beneficio permanente.

Si Mauricio Funes llega al poder, seguramente vendrán las investigaciones de cómo se han manejado los recursos del Estado hasta el último gobierno de ARENA. Este va a ser un procedimiento inevitable porque es necesario comenzar con las cuentas claras. Nos daremos cuenta entonces, de los gastos millonarios generados utilizando las partidas secretas de las diferentes instancias del Estado. Que no le vaya a extrañar escuchar lo desmesurado que han sido estos gobiernos de derecha.

Acá es muy probable que se encuentren muchos vacíos que van a ocasionar incluso procesos penales. En América Latina han existido muchos gobiernos que cayeron en actos de corrupción y por ello, en dichos países, se llevó a la cárcel a antiguos presidentes.

Los salvadoreños vamos a tener que contribuir en la reconstrucción. Tenemos la responsabilidad de colaborar en este esfuerzo que seguramente nos exigirá paciencia para poder ver los resultados que se esperan. Nada es de la noche a la mañana. Yo insisto que sería bueno crear un a pacto fiscal desde ya, para que así, el gobierno entrante ya cuente con este ingreso extra que ha sido negado, todos estos años, con la complicidad de los gobiernos areneros.

En términos generales, si Mauricio Funes llega al poder, tendremos a un El Salvador con nuevas oportunidades, tendremos una oportunidad de un nuevo comienzo hacia una era de trabajo con miras hacia el beneficio de TODOS los salvadoreños. Tendremos una nueva era en donde podremos ver realizados los sueños de los más necesitados, una nueva era en donde lo principal será lo social, una nueva era de nuevos inversionistas que seguramente ya están esperando en línea a que se suelte el monopolio gubernamental.

Pero lo más importante, Si Mauricio Funes llega al poder, tendremos como presidente a un salvadoreño y cristiano de corazón, democrático; defensor de los desprotegidos, conocedor de los problemas del país, conocedor de soluciones, un hombre de consenso, con madurez, sin pelos en la lengua y con los brazos muy libres para defender hasta combatir por debate, sin temor, sus creencias y sus libertades.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Mauricio Funes nuestro seguro presidente!!!

Pero lo más importante, Si Mauricio Funes llega al poder, tendremos como presidente a un salvadoreño y cristiano de corazón, democrático; defensor de los desprotegidos, conocedor de los problemas del país, conocedor de soluciones, un hombre de consenso, con madurez, sin pelos en la lengua y con los brazos muy libres para defender hasta combatir por debate, sin temor, sus creencias y sus libertades.

Viene el cambio...